lunes, 14 de abril de 2014

Entrevista ghct-noticias



- Pedro, sabemos que su color es el azul, ¿por qué?
En realidad no tengo color favorito, pero sin el mar no soy nadie. Hay un determinado matiz de rojo que me fascina; pero ¿y los verdes? Ay, me entusiasman los grises casi guarros, ¿qué puedo hacer…?

- ¿Expresa sus vivencias a través de sus cuadros?
Cualquier expresión creativa se alimenta de lo que somos, y somos según lo que vivimos. Creo que si creamos de forma honesta, nos estamos retratando en cada renglón, en cada trazo.

- ¿Desde dónde fluye su pincel?
Espero que desde muy hondo, para que no se note.

- ¿Qué ambiente necesita para pintar?
Soledad y música sin palabras; que el tiempo fluya lo más despacio y resbaladizo que sepa.

- ¿Qué experimenta al pintar?
Cuando entras en esa fase que los psicólogos llaman “de flujo”, dónde el tiempo no existe, dónde no tienes memoria y sólo importa el presente; estás como poseído y sabes que de ahí saldrá algo grande… Hasta que despiertas.

- ¿Qué estilo pictórico no pintaría nunca?
El estilo siempre debería ser involuntario. Decidir, elegir o fingir un estilo me parece un síntoma de estafa, a ti mismo y/o a los demás. Trato de ser sincero y que mi estilo acabe siendo consecuencia de mis miserias, no al revés.

- ¿Cuando pinta, desaparece el Pedro cotidiano y aparece otro?
No quisieras verme cuando pinto; el Pedro en acción se vuelve desagradable, más de lo habitual. Por eso trato de estar solo cuando eso ocurre.
Como el hombre lobo cuando se le empieza a alargar la pezuña y le grita a la chica: “¡Vete, vete, confía en mí, te querré siempre, pero corre, lejos!”.

- ¿Cuál es el lugar más inverosímil en el que ha pintado?
En una galería, con el cuadro ya colgado. Bueno, fueron unos retoques de penúltima hora, técnica seca, nadie lo notó.
No, nunca lo he hecho en un Simca mil.

- ¿Tiene alguna máxima a la hora de pintar?
No, tengo un mínimo: empezar, que lo bueno está por venir.

- ¿Su presencia en el Arte es cómo usted pensó?
No esperaba siquiera existir cuando empecé. Pero es verdad que uno se va maleando poco a poco y ahora ya tengo hasta vanidad.
Querría crear obras cada vez más potentes y, que se valoren, claro. Hasta ahora siento que conecto con mucha gente, personas que adoran el arte. Eso ya es mucho. ¡Seguimos!

- ¿Qué hay de auténtico en el Arte?
En el Arte lo único auténtico es el Arte, es decir, un 7,5%, según estudios recientes (Mac Broch Cerull, 2007)
Del restante 92%, un 72% está constituido por una particular amalgama de vanidades, complejos varios, modas, vacío existencial relleno de pasta dientes, poder, dinero, comparsas y píldoras permanentemente doradas.
No obstante, ese 7,5% es glorioso e inmenso, rebosa pasión y amor a la vida, y está constituido de talento y dedicación, de obras eternas y caducas pero sentidas y de los amantes de estas creaciones. También ellos son Arte.
Del restante 20,5% nada se sabe, aunque no faltan las especulaciones.

- ¿Su trayectoria artística es un viaje hacia…?
Podría responder con el tópico: un viaje hacia el interior de uno mismo, pero no lo voy a hacer. Es un viaje, sin más. Pero si insistes, te soltaré otro tópico que me gusta aún más: lo importante no es el destino, sino el viaje, el camino.

- ¿Quiere traspasar fronteras con su pintura?
Mira, el hecho de que ya, cientos de personas se hayan comprometido con mis “aguarrasadas”, es realmente traspasar fronteras. Sí, me sigue pareciendo un milagro maravilloso que una persona se mezcle, se enlace, se junte con un pedazo de mí en forma de superficie plana, el lugar dónde derramo y fijo mis emociones y que esta relación sea para siempre y más. Que esto siga creciendo es un impulso extra, que no imprescindible, para seguir.

- ¿En qué sala del mundo le gustaría exponer?
No quiero exponer por exponer, ni salir por salir. Sí aspiro a que el máximo de gente vea lo que hago, pero sobre todo lo que haré en el futuro. Por otro lado, no pienso partirme el culo por lograr que me expongan en salas insignes, por mucha ilusión que me haga.
A este hombrecillo le apasiona la creación, lo demás no tiene valor, en realidad.

- ¿Dónde están las oportunidades pictóricas?
En el taller, sin duda. Aunque vivir también ayuda: charlar entre amigos y desconocidos, disfrutar de las artes, rascarse la espalda sin mover los brazos, caminar sobre la arena, practicar la cópula con la persona que te ha elegido, perderse en ciudades desconocidas, desayunar espaguetis con mantequilla, todo te alimenta para poder devolverlo después a la tela o al papel y, que emocione a otros, aunque sean adictos a la tv, a los juegos de smarphone o a la ropa cara de usar y tirar.
¿Te referías a otra cosa? Pues no, eso no, “el trabajo de pasillo” no va conmigo.

- ¿Lee las críticas sobre su obra?
Siempre ayudan las opiniones del público, especialmente si son mal intencionadas.

- Dentro de ese conglomerado que es una exposición, ¿cómo se siente?
Acongojado y feliz de conectar. Como toda persona, frágil como somos todos, me gusta gustar, aunque me intrigue y me estimule también lo contrario.

- ¿Qué proyectos tiene, su próxima exposición ya está en marcha?
Tras dos series largas y trabajadas, Fricciones (2012) y Silent-es (2013), ahora estoy dibujando más que pintando, rastreando y aprendiendo. Veremos a dónde me llevo.

- Para terminar, díganos: ¿qué razones son fundamentales para defender el Arte ?
No encuentro ninguna razón para defender el Arte, lo que me hace sospechar que se trata de algo realmente grande.

Gracias Pedro Lezcano Jaén, sus respuestas han hecho que sonría con empatía durante todo el tiempo en el que le he estado leyendo.

Entrevista: Albertine Orleans -Escritora y amante del ARTE con mayúsculas.
Montaje y publicación: GHCT-noticias.com



No hay comentarios:

Publicar un comentario